Belgica.Pais de la tranquilidad

U
na de las escapadas que hicimos en estas vacaciones fue al norte de Europa, precisamente a Bélgica y con esta ya sería mi segunda visita a este país.
Realmente Bélgica no es que sea el país más divertido del mundo pero en esta ocasión y a diferencia con la primera vez que visite Bruselas que fue más de ocio íbamos en visita familiar debido a que mi pareja tiene familia allí por lo que me involucre en lo que realmente es el carácter belga.





La familia belga en general es muy educada y culta y te abren la puerta sin contemplaciones, al menos la que nos acogió a nosotros y quizá es la diferencia entre el norte de Europa y el Sur.
En esta diferencia yo ponía en comparación por ejemplo a España y Argentina. Para un español, Argentina y en general Latinoamérica es un hervidero bullicioso de tráfico, prisas y desorden. Un paseo por las calles latinas y te das cuenta que cada uno mira por si solo y camina recto sin miramientos y quizá a los españoles eso nos parece demasiado desordenado ya que quizá en España hay más respeto a la otra persona. Entonces la critica que solemos hacer nosotros de Latinoamérica puede ser comparada a la critica que hacen en el norte de Europa a los del Sur de Europa. Bélgica es tranquilidad si serenidad y eso que la climatología no ayuda a esto ya que es un tiempo tan susceptible de cambios radicales pero aun así, eso no altera el carácter belga.
A parte de esto Bélgica es un país pequeño pero hermoso y tengo previsto la vuelta en algún momento para ver las hermosas ciudades del norte como Amberes y Brujas pero esta vez me quede en Bruselas, Nivelles y Lovaina La Nueva.

De pequeño ya me gustaba ojear libros sobre países y saber algo de ellos y recuerdo además esos libros de texto de la EGB donde aparecen edificios de todo el mundo y lógicamente el Atomium es uno de esos que marca la diferencia.




Hasta que hice la primera visita no sabía muy bien que es lo que albergaba dentro de esas gigantescas bolas y bueno, no es más que un museo que muestra la historia del Museo, de su construcción y de la Expo Universal de 1958 para la que fue construido. Sin duda, creo que es más impresionante por fuera que por dentro.



Lo que de verdad impresiona por el paso de los años es la Gran Plaza, La Grand Place según ciertos organismos es la Plaza más bella del mundo. Nunca dudaré si es verdad o no lo que sí que sé que es impresionante estar en el centro de esta plaza y ver toda su belleza que lleva levantada por más de cuatro siglos.






Ojala llegue el día que pueda visitar algún país con todo el tiempo del mundo para descubrir todos los rincones que ocultan porque como bien dije en un principio, era más una visita familiar que una visita turística por lo que me dejo de lado muchos sitios preciosos de esta ciudad. 




Ya en Nivelles puedo decir que esta es una pequeña ciudad al sur de Bruselas muy tranquila y tipica ciudad belga de la que puedo destacar la Colegiata de Santa Gertrudis que data de los siglos XI y XIII que cuando la quise fotografiar daba un aspecto hermosamente tenebroso.




Mientras y ya en casa y degustando la tipica gastronomia belga, me queda recordar a mis ídolos de comics de cuando era pequeño. Tintin y Milu, Spirou , marsupilami y alguno mas que me acompaño toda mi infancia y que sus creadores anduvieron por donde estoy yo en estos momentos.




Burgos ciudad Bravía

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urgos no fue mi ciudad natal. Quizá tampoco ha sido la ciudad que ha marcado mi infancia y ha forjado mi carácter pero como bien dije en anteriores post, cada persona es como un árbol y siempre tenemos más de una raíz a la que debemos dar gracias de nuestra personalidad y sin duda esta ciudad lo es.


Panorámica de Burgos desde el Castillo al atardecer
Provincia natal de mis padres, ciudad que en sus épocas fue gloriosa acogedora de reyes y caballeros, hoy Burgos es una elegante ciudad a la orilla del rio Arlanza que vive a la sombra de su gran Catedral se cobija bajo las mantas para soportar el frio que en ocasiones sirve como llamada turística y es que pese a que el verano en España es caluros Burgos no le hace caso y se queda en un eterno invierno que nos deleita de vez en cuando con algún que otro rayo de sol.
Burgos, ciudad bravía, me atrajo desde el primer momento que decidí dejar mi casa para estudiar aquí y desde entonces dividió mi corazón en dos grandes partes de la que sin duda alguna en esta tierra dejo mis mejores momentos. En esta ciudad aprendí a ser adulto a ser responsable, a ser yo mismo, en esta ciudad encontré gente que pese al carácter duro en las primeras conversaciones en las siguientes te abren su casa y te la ceden sin contemplaciones. Así es Burgos pequeña pero llena de encanto, vieja pero a la vez madura y vigorosa.




Los aires fríos de las sierras hacen mella en las pieles del burgalés pero no hielan sus corazones. A Burgos le tengo que dar tantas veces las gracias que me quedarían sin aliento.

Si Burgos fuera mujer sin duda enamoraría a la primera vista.
El símbolo más importante de Burgos es su catedral. Siglos y siglos de pie sin cansarse y siempre con sus puertas abiertas a toda la gente y en especial a los peregrinos que van en procesión y es que esta ciudad es alto obligatorio en el duro camino hacia Santiago de Compostela.


El famoso Papamoscas dentro de la Catedral

Burgos, con su magnífica gastronomía no solo es una lugar maravilloso a los ojos sino que el buen yantar está presente en todas sus céntricas calles. En todas ellas una gran variedad de bares con geniales tapas y pinchos nos sirven cada día de exquisitos aperitivos.


Otro de los lugares típicos de esta ciudad es el Paseo del Espolón, la sala de Burgos, a la orilla del Rio Arlanzón se dibuja este paseo que con cada estación cambia su imagen y que siempre es precioso. A la sombra de los cipreses podados con mil formas y a los plátanos de sombra que en otras épocas se ven anudados unos a los otros recorremos este paseo de la ciudad.







La ciudad también encontró su soporte económico gracias al Museo de la Evolución Humana, MEH y los descubrimientos de restos homínidos en Atapuerca y gracias a esto, la ciudad vivió una transformación renovando sus paseos atrayendo de esta manera a miles de turistas al año.

 






Burgos encanta, le verdad sea y vuelvo a decir que mi corazón se divide con esta ciudad porque la quiero y la llevo muy dentro de mí por lo bien que me ha tratado, por la simpatía de su gente que te abre las puertas de par en par. Pese a que la mayoría de la gente es mayor debido a la despoblación de las zonas rurales, todavía sigue su carácter jovial y transformador.
Así es Burgos ciudad de héroes.



Hierro, acero y cristal.Bilbao


B
ilbao. Del hierro al acero y del acero al cristal. La ciudad con el que quizá haya sido el cambio sociológico más importante de España ya que ha transformado totalmente su fisionomía en todos los aspectos.
La ciudad se ha abierto al futuro y al diseño creando así una ciudad cosmopolita con un tamaño no tan agobiante como Madrid o Barcelona y del que se respira aun aires de pequeña villa en una gran ciudad.
Atrás se dejaron las viejas tascas para dar lugar a restaurantes y bares de diseño donde mostrar la más variada gastronomía para el disfruto tanto de los vecinos de Bilbao como de la cantidad de viajeros que vienen aquí.

Desde el Barrio de San Mames hasta las Siete Calles o el Casco viejo el que ha tenido la posibilidad de conocer la ciudad en años se da cuenta rápidamente de lo que estoy contando ya que hace 15 años era un paseo viejo, perdido y negro. Agua contaminada corriendo por la Ría del Nervión y suciedad en sus rincones han dado lugar a una transformación hacia un paseo verde y limpio, amplio para facilitar los paseos y dejar ver más majestuosas fachadas del Barrio de Deusto.
Empezando por el principio, Bilbao es una ciudad que vive muy ligada al futbol. Aquí este deporte es pura pasión pero pasión de verdad y muestra de ellos es el recuerdo de los domingos con todas las ventanas engalanadas con los colores del Athletic Club de Bilbao y gracias a esa pasión se pudio invertir en lo que será otro punto de referencia de la ciudad. El Nuevo San Mames o la Nueva Catedral para seguir acogiendo los miles de gritos de ánimo al equipo.


En la Plaza del Sagrado Corazón de Jesús se erige este monumento que recuerda el culto de esta ciudad a la religión.


Cerca de esta plaza encontramos el Palacio de Congresos y a su izquierda el Puente Euskalduna que une con una majestuosa curva los dos lados de la Ría de Bilbao, justo detrás, en Olabeaga se alza La Karola Patrimonio Industrial de Bizkaia, 60 metros de altura y 30 mil kilos de acero. Una grúa que servía para la estiba y la desestiba de los barcos que llegaban al Puerto de Bilbao.


La vista que nos ofrece el otro lado del puente nos deja perplejos y es que se levanta un rascacielos de cristal que hace de espejo al cielo casi siempre nublado de Bilbao y creado por el arquitecto argentino Cesar Pelli. Casualidades o no, Buenos Aires es ciudad hermana de Bilbao.


A la izquierda tenemos Deusto, barrio importante en la economía bilbaína y vasca por ser lugar de grandes universidades y donde Vivian los más adinerados de la ciudad a principios de siglo. Gracias a esto, muchos propietarios querían demostrar su poderío económico más allá de sus empresas y se disponían a engrandecer sus edificios con estas imágenes. En este caso, el Tigre era una fábrica de correas donde el propietario tuvo, según se cuenta algún encontronazo con la burguesía de la ciudad por lo que corono su edificio con un tigre amenazador que no deja de rugir en ningún momento.




El Guggenheim es sin duda el punto de cambio de esta ciudad. Un proyecto que quería revitalizar la economía de una región estancada en los viejos usos del metal y de la siderurgia que venía demandando un cambio a gritos. Un acierto sin dudas que va más allá de un simple museo, una mejora turística que puso a Bilbao y a Bizkaia en el mapa de los lugares a visitar al venir a España. Una mole de acero, cristal, titanio y roca caliza que se va acomodando a la ciudad dependiendo del lugar donde lo mires. Una obra de arte que alberga más obras de arte. Arte contemporáneo en Arte contemporáneo. Una joya para la vista.

 




En esta parte de Bilbao casi empieza la revolución arquitectónica ya que en un mismo paseo podemos ver las Obras de Pelli, Gerhy, Arata Isozaki y Calatrava a las que desde el nuevo y moderno tranvía podemos ver. Quizá la envidia de muchas ciudades.







Justo al finalizar el paseo y llegar al Puente del Arenal vemos la arquitectura clásica de Bilbao y la entrada a sus Siete Calles. El ayuntamiento de Bilbao de construcción clásica comparte espacio con una obra más moderna como La Variante Ovoide de Oteiza, representante de la escultura vasca.


Sin duda alguna Bilbao es mágica, es evolución constante y quizá algún día vuelva a vivir aquí, y si no lo es la llevare dentro de mi corazón como ejemplo de adaptación a los cambios constantes de la vida. Es un grito a la adaptación de entorno que lo hace de una manera ordenada aunque radical. Nunca dejaras de sorprenderme Bilbao.




Las primeras raices


A
quí empezó todo, aunque no pueda decir que mis raíces sean 100% vascas pero el País Vasco tiene un magnetismo especial que te da la tierra en la que naciste pese a que durante mucho tiempo de mi vida he estado alejado de él.


Santurtzi es la tierra que me vio nacer, y por sus calles correteaba a través del barrio de la Txitxarra y las frecuentes visitas al puerto mientras mis ojos se maravillaban con los barcos pesqueros que llegaban cargados de esos pescados tan frescos y que depositaban en el muelle al lado de la lonja de pescadores.
Aun al pasado por aquí, el olor a mar, a salitre y el sonar del agua contra el Puerto del Abra me causan una nostalgia muy dentro de mí de querer volver a esta tierra y seguir viendo los continuos cambios que está sufriendo.
Santurtzi, Bilbao, la margen izquierda o todo el País Vasco en general ha sufrido durante los últimos años una fastuosa modificación dejando atrás los años duros de ciudad gris envuelta en el humo de los Altos Hornos y forjadas con el metal de sus venas y escupiendo contaminación y degradación que se visualizaban grises en las fachadas de sus casas.



Desde los montes de la Arboleda hasta el mismo centro de Bilbao se ha reconstruido esta región dándole belleza con su inteligente mezcla entre lo tradicional vasco y lo moderno y aquí comienza todo, en los montes que propiciaron el cambio, en los montes donde el hierro corre por el interior dando el carácter a los vascos.








En estos montes se desgajaron las laderas para arrancar toda la cantidad posible de hierro para la potente siderurgia vasca durante todo el siglo XX y del que hoy quedan los recuerdos en los museos y las manos callosas de los mineros más viejos.
Pese a la cercanía con los montes y los valles mineros de Abanto y Ciervana y Ortuella, Santurtzi, mi pueblo, creció algo ajeno a esta industria y más volcada en mantener la barriga llena de ricos pescados a todos los trabajadores de esta margen. Hoy en día el colorido puerto pesquero nos deja todavía estampas similares a las de 20, 30 o quizá 50 años atrás con sus barcos pintados con los colores del País Vasco o los colores de la Mar, todo siempre bajo la atenta mirada de La Virgen del Carmen, la Virgen de los pescadores a los que protege y que cada 16 de Julio se la venera dándole un paseo hasta alta mar para que las capturas sigan llegando a las casas.


Santurtzi sigue modernizándose y cuenta de ella es que dejo atrás el viejo desorden de los barcos en el puerto dando lugar a un Ordenado y perfecto Puerto para los usuarios.




Siguiendo por el Paseo del Puerto, hacia Portugalete, pronto se deja ver el otro lado de la Ría de Bilbao y la desembocadura del Nervión.
En el siglo XX esta zona se dividió en la zona obrera y la zona burguesa. Las Arenas, enfrentada a Santurtzi y Portugalete, era lugar de vivienda para la gente adinerada dueños de las mayores empresas vascas y de las acerías del momento.

Sigue siendo una zona mucho más cuidada que la obrera Margen Izquierda pero nunca se intentó crear nodos de desigualdad y cuenta de ello es el intento de unir estas dos márgenes con el Imponente Puente Colgante o Puente de Vizcaya
Este puente fue el primero de esta tipología que se construyó en el mundo y casi era un símbolo anticipado del carácter innovador de esta región. Con más de un siglo de vida sigue permitiendo el paso a gente y vehículos y sirve de mirador para ver el esplendor de la Ría de Bilbao.




Sin duda alguna causa ciertos remordimientos y ciertas sensaciones el estar aquí en este momento y quizá ahora que estoy lejos, veo todo con otros ojos y quiero aprender más y más de cada rincón del País Vasco y es que como ya comente, es una de mis raíces y es que cada persona tenemos más de una raíz y en mi caso se reparten con el mismo sentimiento entre Santurtzi y Burgos y quizá van más allá.
Continúo el paseo hasta Bilbao, la Capital y el núcleo duro de la imagen del cambio, del paso del Hierro al Metal y del Metal al Cristal. Un cambio radical que ha cambiado caracteres y costumbres.



Lo describiré en la siguiente entrada.

Madrid, Madrid, Madrid

“Sólo te nutre tu vívida esencia. Duermes al borde del hoyo y la espada. Eres mi casa, Madrid: mi existencia, ¡Qué atravesada!”  Miguel Hernández

Madrid, Villa de Madrid…no se puede percibir tanta belleza en tan poco tiempo. Andar por las calles de esta gran ciudad te hace que el reloj avance sin control y se te pasen los segundos, las horas y los minutos en lo que te dura un suspiro al ver cualquier elemento arquitectónico de la ciudad.






Y es que en esta ciudad te da para mucho y yo lamentablemente en esta ocasión no tuve mucho tiempo para detenerme en cada avenida.
Ciudad histórica de mezclas de cultura, de mezcla de todo, con un orden caótico que me hace compararlo cada vez aunque no lo quiera con la ciudad que actualmente vivo. Buenos Aires.









Parece que el Océano Atlántico es un eje de simetría en el que se proyectan ambas ciudades, Buenos Aires loca y acelerada, Madrid acelerada y loca, cada una con sus pros y sus contras pero las dos con su mezcla de identidades y con la búsqueda de todas estas nacionalidades que habitan en cada ciudad de su propio sitio.
Hablar del Retiro es hablar de Historia, de literatura, de películas de todo y sobre todo es hablar del pulmón que alimente y da vida a esta ciudad. Es hablar de la denostada monarquía y su afán de ser recordados cada uno de ellos durante años y siglos en sus delirios de grandeza que de vez en cuando sirven para el deleite de la vista por casi cuatro siglos y que han sido escenario de rebeliones, guerras y reconstrucciones.



En ocasiones veo a Madrid en blanco y negro, porque creo que la arquitectura actual carece de un gran colorido y deja imaginar a cada uno sus propias formas y su propia personalidad ya que en Madrid conviven perfectamente las nuevas arquitecturas con las construcciones clásicas.


Continuando con las comparaciones, Gran Vía será como Avenida de Mayo con sus fachadas historicistas y sus cúpulas en lo alto de cada edificación.

Lástima que mi tiempo en Madrid es corto pero me da para reconocer que cuando vivía en España era en ocasiones ciego a ciertos escaparates y lugares que tienen una vida increíbles y que ahora que lo tengo lejos se echa de menos. Eso dicen, no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes, o como en mi caso, hasta que lo tienes pero lejos por lo que me queda y puedo prometer que en mi retorno, recorreré cada calle de Madrid empapándome de la historia vida de la ciudad.



Hasta Pronto Madrid